2020 fue un año de cambios profundos en como nos comportamos, nos relacionamos y consumimos. El tema de 2020 fue sin lugar a dudas la digitalización masiva, ya que si es que aún había quienes eran reticentes a usar los medios digitales, durante el año pasado fue imposible el evitarlo. El futuro nos ha alcanzado. En este sentido, me sorprende que (aún) hayan emprendimientos que no consideren una actividad fundamental su imagen digital, dejando esta meramente a la existencia de un logo (cuya eficiencia comunicativa es tema de análisis para los diseñadores gráficos, que algo tendrán que decir al respecto). Ya en 2017, en mi práctica inicial este tema llamó mi atención: el nulo uso de redes sociales más allá de recibir mensajes de posibles pasajeros, sin creación de contenido para generar una comunidad y fomentar la difusión de la marca (el negocio en sí). Yo esperaba que ya a estas alturas, considerando las circunstancias en las que se encuentra hoy por hoy la industria turística, y tenie...